El teatro musical se encuentra en una época dorada en nuestro país. Son muchos los proyectos tanto de gran formato como de pequeño que han ido copando nuestra cartelera.

Con “El piso de arriba” queremos hacer un ejercicio no solo de nueva creación de teatro musical, sino de dotarlo de nuestra cultura, nuestra historia y nuestro adn.

En esa investigación hemos partido de una composición musical mucho más urbana y mas cercana a un estilo de cantautor de sala de Madrid que de un estilo americano o anglosajón.

La historia es la vida de una pareja que podría ser nuestros vecinos, amigos o los de la mesa de enfrente de un bar de Malasaña.

Otro aspecto diferenciador de los musicales de importación es el libreto. Una historia con arco completo que pasa de la comedia al drama e incluso la tragedia, todo con un lenguaje actual, muy nuestro.

La escenografía representa una buhardilla enana de la capital y los problemas y tramas pese a resultar universales, son muy cercanos y el espectador se puede sentir identificado.

En definitiva nuestro objetivo a sido hacer un retrato generacional a ritmo de musical con canciones originales y un mensaje y un lenguaje cercano al espectador.